Noche ampurdanesa.
Estío. Noche serena, de casi plenilunio. Una mesa compartida: Marta G., Marta R., Albert, Forti, Ramon, Pep y el menda (si me sacudo la modestia y sumo: siete magníficos). Y Martí, que cuidaba de nosotros en su Restaurante-Brasería como restaurador y como amigo. Fue una agradabilísima velada de tertulia en que la charla daba paso a la risa y vuelta a empezar.
No estaban todos los que son; pero, como bien dice el retruécano, eran todos los que estaban. Y al resto se les trajo a la conversación. Y, mientras las estrellas titilaban, nos los llevamos por el camino largo a La Luna.
3 comentarios
Gin -
Juanjo -
rim -
La próxima puede ser Begur - (Galena, of course) Marte.
¡Si es que tenemos media galaxia a un pasito de 'na'!