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A ContraLuz

Diz que...

En un exceso de cariño, la buena de Sakk me ha otorgado este premio "bloguero":

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Recuerdo que abrí el A Contraluz como banco de pruebas en que adiestrarme. Se trataba de luego ser capaz de tutorar una experiencia TIC con alumnos del instituto. Dicha experiencia fue llevada a cabo, pero esta página permaneció durante largo tiempo inerte. Luego, Bel me animó para comenzar a nutrirla. Lo cierto es que, a día de hoy, todavía no acierto a darle un sentido -si es que ha de tenerlo- a eso de ir asomándome de pronto en tarde a esta ventana. Tengo claro, sí, que sigo en el empeño por la misma razón por la que, por ejemplo, se decide ir al gimnasio, esto es, entreno. Mi colega en el Departamento, Josep Giralt, se encargaba hace apenas unos días de explicitarme tal razón que, pese a evidente, era a mi entendimiento sólo implícita. En fin, eso y también algo del espíritu al que la propia Sakk, impenitente hacedora de palabras, hacía referencia en uno de sus últimos artículos.

No soy ducho en esto de los premios cibernéticos, pero creo que he de otorgarlo a mi vez a siete bitácoras más. No sé hasta qué punto no sería inmiscuirme -sí, con razones; pero no, con autoridad- y, por tanto, no explicito enlaces; pero si Bel, Jrd, Estepa Grisa, Mahaya, García-Máiquez, Ángel o Paty lo quieren, es suyo, antes que mío, por derecho propio.
Gracias.

4 comentarios

Juanjo -

Jrd, ya me pasé por tu segunda y lo tendré por costumbre a partir de ahora, sin duda. Me parece un acierto el criterio que has tenido para crearla y mantener la otra.

Un abrazo, voz.

jrd -

Yo creo que el premio que te han otorgado, está mericidísimo (que complicado es escribir este vocablo), jajaja. Si no hubiese sido por el empujoncito que me dísteis Bel y tu, y por vuestros comentarios, ahora yo no estaría con 2 bitácoras abiertos.

Muchas gracias a los dos y enhorabuena por el premio!

Sakkarah -

Dicen que todo tiene una razón de ser, aunque no la sepamos...

No a todo le encontramos el sentido; pero...ojalá se lo encuentres para que no la dejes. Me daría mucha pena quedarme sin mi amigo.

Un beso.

Bel -

El empujón sirvió la pena, ya que me encanta asomar la nariz y ver qué has escrito. Y con la cantidad de borradores que tienes, sé que no nos faltarán nutrientes.
Merecido premio, el tuyo.
un ósculo.